Locomotora de vapor "Echeverría". Fotografía de Juanjo Olaizola Elordi
El pasado 18 de mayo, en coincidencia de la celebración del Día Internacional de los Museos, auspiciado por el Concilio Internacional de los Museos (ICOM), de la UNESCO, los museos ferroviarios de Azpeitia y Gijón decidieron hermanar las locomotoras de vapor "Echeverría" y "SAF 1" preservadas en ambas instituciones, siguiendo el lema elegido para la jornada en este año: "Las colecciones crean conexiones"
Ciertamente, existen muchos motivos para el hermanamiento de ambas locomotoras. Las dos fueron fabricadas por el mismo constructor, la firma alemana Henschel (Kassel), en idéntico año, 1952 y corresponden a modelos muy similares, algo más grande la guipuzcoana, dotada además de distribución cilíndrica, frente a la más convencional, plana, de su hermana asturiana. En todo caso, su aspecto exterior, incluida la pintura y decoración, era prácticamente idéntica y las dos compartían numerosos detalles, por otra parte, propios de los ferrocarriles alemanes.
Placa de construcción de la locomotora "Echeverría". Fotografía de Juanjo Olaizola Elordi
La vida de ambas locomotoras presenta, además, curiosos paralelismos. Las dos fueron las primeras adquiridas para la explotación de sendos ferrocarriles industriales, la "SAF I" en la mina de La Camocha (Asturias) y la "Echeverría" en el ramal de Zumárraga a Legazpia, propiedad de la firma Patricio Echeverría. Ambas fueron bautizadas con el nombre de los empresarios fundadores de ambas dependencias, ya que SAF significa Sociedad Anónima Felgueroso, promotor de la mina de La Camocha. Además, ambas pronto contaron con la compañía de otra locomotora de vapor en su feudo y, en ambos casos, modelos anticuados, adquiridas de ocasión. Por otra parte, en los años sesenta y setenta fueron sustituidas por una locomotora diésel-hidráulica, la tercera y última del parque motor de las citadas explotaciones ferroviarias. Finalmente, las dos locomotoras han sido preservadas en los años noventa por los museos de Gijón y Azpeitia.
Locomotora "SAF I" fotografiada en La Camocha en 1952. Archivo del Museo del Ferrocarril de Asturias
Por pocos meses, la "SAF 1" es la más antigua de las dos. Con el número de fábrica 24.924, según Javier Fernández López, fue encargada por la Sociedad Anónima Felgueroso para el
servicio de maniobras en la carga y pesaje de vagones en la estación de La
Camocha,. Como ya se ha indicado, fue bautizada «SAF 1», iniciales de la empresa de
los hermanos Felgueroso. Posteriormente, la Minero Siderúrgica de Ponferrada, sucesora
en la propiedad de la mina de La Camocha, la mantuvo en servicio, si bien
compartiendo tareas de maniobras con otras locomotoras de vapor llegadas desde su
sede de Ponferrada, una de las cuales, de segunda mano, construida en Gran
Bretaña por Nasmyth Wilson en 1891, con el número 411 para el Ferrocarril de
Triano, llegaría a ser denominada «SAF 2».
Locomotora diésel construida por Babcock & Wilcox bajo licencia Hunslet para la mina de La Camocha. Archivo EuskoTren/Museo Vasco del Ferrocarril
La «SAF 1» permaneció en servicio hasta 1973, cuando con
la adquisición de una locomotora diésel Hunslet Babcock & Wilcox, quedó
apartada como reserva, hasta el cierre del ferrocarril a mediados de los años
80 lo que permitiría su conservación. En 1994, Mina la Camocha S.A. la entregó al
Ayuntamiento de Gijón para su definitiva preservación, siendo trasladada el 29
de diciembre de dicho año al Museo del Ferrocarril de Asturias.
Locomotora "SAF I" fotografiada en el museo de Gijón. Fotografía de Javier Fernández López
Una vez en el Museo fue completamente rehabilitada por su
Escuela Taller, recibiendo una caldera de nueva construcción, de tal forma que
fue posible recuperar su total funcionamiento el 25 de noviembre de 1995. Desde
entonces se ha mantenido en disposición de marcha, siendo encendida para
exhibiciones en las jornadas del vapor y
otros eventos. En la actualidad se han
emprendido en esta locomotora tareas de puesta a punto, que desarrolla el
equipo técnico del centro con la colaboración de la Asociación del Amigos del
Museo del Ferrocarril. Las labores incluyen la
preceptiva revisión de la caldera, mantenimiento mecánico, saneamiento general,
trabajos en superficies metálicas y pintura.
Locomotora "SAF I" en sus primeros servicios en el Museo del Ferrocarril de Asturias. Fotografía de Juanjo Olaizola Elordi
En cuanto a su hermana guipuzcoana, fue adquirida por la empresa Patricio Echeverría de Legazpi (Gipuzkoa), sociedad que había experimentado tras la guerra civil un notable aumento de la demanda de sus
productos, lo que implicó el incremento de sus necesidades de transporte, tanto
de materias primas como de producto terminado. Con el fin de mejorar sus
comunicaciones, esta empresa decidió construir un ramal industrial, de más de
cuatro kilómetros de longitud, que permitiría enlazar sus instalaciones
fabriles con la estación de Zumárraga, punto en el que convergía el ferrocarril
de vía ancha explotado por Renfe de Madrid a Irún, con las líneas de vía
métrica de Málzaga a Zumárraga de los Ferrocarriles Vascongados y de Zumárraga
a Zumaya, del Ferrocarril del Urola.
Locomotora "Echeverría" fotografiada en la factoría de Patricio Echeverría. Fotografía de Juanjo Olaizola Elordi
Al contar la estación de Zumárraga con dos anchos de vía diferentes, Patricio
Echeverría decidió implantar a lo largo de su línea tres carriles, de modo que
por ella podían circular vagones, tanto de vía ancha como de vía métrica. Para
remolcarlos, adquirió en el año 1952,
a la firma alemana Henschel & Sohn una locomotora de
vía ancha, pero que en ambos testeros disponía también de los aparatos de
choque y tracción necesarios para poder arrastrar también vagones de vía
métrica. Construida bajo el número de fábrica 25.174, fue bautizada como «Echeverría». Además, poco después adquirió
de ocasión, al Ferrocarril de Santander a Bilbao, una locomotora de vapor de
vía métrica destinada específicamente a este servicio en concreto la 030T Nº 3
«Güeñes», construida por Hunslet con el número de fábrica 538 en el año 1891.
En la factoría guipuzcoana fue rebautizada como «Echeverría II».
La locomotora diésel "Echeverría III" retiró del servicio a la "Echeverría". Fotografía de Juanjo Olaizola Elordi
En 1962, Patricio Echeverría adquirió una nueva locomotora diesel, la «Echeverría III», también construida por Henschel, para el servicio de su ramal, por lo que, poco después, procedió al desguace de la «Echeverría II», mientras que la «Echeverría I» quedó en reserva con el fin de poder remplazar a su sustituta en caso de avería. En consecuencia, periódicamente era encendida y sometida a pruebas, operación que se realizó con regularidad hasta principios de los años ochenta, cuando decayó el uso del ramal. En 1992 la locomotora de vapor «Echeverría I», fue cedida al Museo Vasco del Ferrocarril.
La "Echeverría" fotografiada durante las pruebas realizadas en el Museo Vasco del Ferrocarril en 1995. Fotografía de Mercedes García Fernández
Las locomotoras que se mencionan están relacionadas con el Ferrocarril de La Mina de La Camocha.
ResponderEliminarhttp://www.telecable.es/personales/carlosrf1/I-Roces.pdf
Estupenda iniciativa de "hermanar" a estas dos piezas tan entrañables como historicas ambas con raices alemanas,que viene a ser como una merecidisima recompensa al esfuerzo de ambas instituciones asturianas y guipuzcoanas de todo el trabajo de restauracion y posterior conservacion.Muy interesantes tambien ambos tractores diesel,en especial para mi el de Patricio Echeverria(diesel III),recuerdo una imagen suya maniobrando en una playa de vias(Zumarraga?),aparecida en un ejemplar de Trenes Hoy de principios de los 90,aqui ahora con informacion mas ampliada.Enhorabuena por la iniciativa a las dos instituciones,y al autor de esta entrada,por supuesto,por el magnifico trabajo informativo,y que se repita muchas veces dicha iniciativa
ResponderEliminar¿Se sabe el destino de la locomotora Echeverria 3? Gracias.
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