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lunes, 25 de febrero de 2013

LOS TROLEBUSES DE CASTELLÓN



El pasado fin de semana tuve ocasión de visitar Castellón, invitado por su Ateneo para impartir una charla dentro de un ciclo de actividades organizado por la citada entidad para conmemorar el 150 aniversario del la llegada del ferrocarril a esta ciudad.
La implantación del primer tramo del TRAM ha incluido la construcción de un espectacular puente sobre el cauce del río Sec. En todo caso, esta clase de obras encarecen notablemente el establecimiento de este tipo de servicios

Muchos conocen mi particular debilidad e interés por los trolebuses, por lo que aproveché la ocasión para conocer el llamado TRAM de Castellón que, pese a lo que su nombre pueda dar a entender, no se trata de un tranvía sino de un trolebús dotado de un sistema de guiado óptico, equipo que facilita las maniobras de aproximación a las paradas, lo que contribuye a mejorar la accesibilidad de los viajeros.
El TRAM de Castellón circula por un carril reservado en el que destacan las marcas de pintura que sirven para orientar el sistema de guiado óptico. En la parte superior del trolebús se observa la cámara que capta la imagen reflejada por las citadas marcas

En la actualidad, únicamente se encuentra en servicio una pequeña parte del TRAM de Castellón, cuyas siglas, en realidad, significan: Transporte del Área Metropolitana de Castellón, en concreto, entre el céntrico parque de Ribalta y el campus de la Universidad Jaime I, trayecto que entró en servicio el 25 de junio de 2008. Asimismo, se encuentran muy avanzadas las obras de prolongación del servicio desde el parque de Ribalta hasta el Grao. En el futuro, el proyecto impulsado por la Generalitat Valenciana contempla también la ampliación de la línea, hacia Benicassim y la construcción de un segundo itinerario desde el centro de Castellón hacia Villarreal y Burriana.
Obras de prolongación del TRAM entre Castellón y el Grao

A la vista del moderno TRAM y de sus planes de ampliación, pero también de la lentitud con la que se desarrollan las obras de un proyecto iniciado en 2005 y que, por el momento, solo tiene un par de kilómetros en explotación, es inevitable recordar otra iniciativa que, en el pasado, presentó muchas similitudes: la red de trolebuses de La Plana.
Trolebús Pegaso en servicio entre Castellón y el Grao. Fotografía de Jeremy Wiseman


En los años cuarenta, el trolebús era considerado como un medio de transporte revolucionario. Al igual que el tranvía, podía consumir energía eléctrica, una gran ventaja en una época marcada por la una gran penuria de carburantes, mientras que su rodadura sobre neumáticos ofrecía mayor flexibilidad y una suavidad de marcha superior a la de los autobuses. De este modo, tras la inauguración de la primera línea en Bilbao, el trolebús pronto despertó el interés de otras ciudades, obsesionadas en eliminar los tranvías de sus calles.
Bilbao implantó los primeros trolebuses de la Penìnsula Ibérica en 1940

Castellón fue una de las primeras ciudades en interesarse por el nuevo medio de transporte, dado que por sus calles transitaba un curioso tranvía interurbano de vapor, popularmente conocido como "La Panderola" que enlazaba Onda, con la capital provincial y el puerto del Grao. En su recorrido, sus trenes atravesaban algunas de las principales calles de Villarreal, Almazora y la propia Castellón. El servicio estaba gestionado, desde 1933, por la Explotación de Ferrocarriles por el Estado, organismo que, tras la Guerra Civil, decidió electrificar la línea. Sin embargo, pese a que se iniciaron las obras de montaje de la nueva catenaria, el proyecto de los trolebuses de La Plana supuso la paralización de los trabajos.
El tranvía de vapor de Onda al Grao atravesaba en su recorrido algunas de las calles más importantes de Castellón. Fotografía de Peter Willen

Caso único en España, fue la propia Diputación Provincial de Castellón la que tomó la iniciativa para construir la red de trolebuses de La Plana. De este modo, encomendó al ingeniero Adolfo Machimbarrena la redacción del proyecto, que fue aprobado el 10 de noviembre de 1942. La red contemplaba la construcción de una línea desde Benicassim hasta Val de Uxó, que debía pasar por el Grao, Castellón, Villarreal, Burriana y Nules y en la que se ofrecerían servicios, tanto de viajeros como de mercancías, sobre todo con destino a los muelles del puerto del Grao. En principio, la línea contaría con doble vía entre Castellón y Burriana y única en el resto del trazado.
Los trolebuses de La Plana, llegaron a convivir con los tranvías de La Panderola. Fotografía de Edwin Wilmshurst


La tramitación administrativa de la concesión fue particularmente lenta, ya que el Ministerio de Obras Públicas no la otorgó a la Diputación Provincial hasta el 24 de noviembre de 1947, es decir, fueron necesarios cinco años para completar todas las gestiones. Además, el proyecto inicialmente aprobado contemplaba la utilización de una tensión de 1.200 voltios en corriente continua, valor que en aquella época proponía la firma suiza Brown Boveri como  más adecuada para las líneas de largo recorrido y que fue utilizado en la red de Lugano y, también, en los trolebuses de Tetuán, entonces parte del protectorado español sobre Marruecos. Sin embargo, la idea no llegó a cuajar y, ante las dificultades de obtener material móvil alimentado a dicha tensión, el 5 de abril de 1951 el gobierno autorizó a modificar la tensión a 600 voltios,   la más común en las redes de trolebuses de toda Europa.
Pegaso suministró cuatro trolebuses a la red de La Plana. Fotografía de Les Dench

El proceso de establecimiento de la red de trolebuses de La Plana fue muy lento y finalmente incompleto, ya que únicamente se llegó a construir la sección comprendida entre el Grao, Castellón y Villarreal, de 11 kilómetros de longitud, que entró en servicio el 18 de julio de 1961. Pocos días más tarde, en concreto el 14 de septiembre, la Diputación Provincial de Castellón otorgó la concesión para la explotación de la línea a la empresa La Valenciana.


Espectaculares cocheras de la red de trolebuses de La Plana. Tras las dos torres, se encuentra el edificio, similar al de una rotonda de locomotoras de vapor, en el que los trolebuses entraban por un extremo y salían por el opuesto


En principio, el servicio se prestó con cierta normalidad hasta el 29 de abril de 1962, momento en que, debido a diversas deficiencias en las instalaciones fijas y el material móvil se paralizó el servicio. Posteriormente los trolebuses volvieron a circular, pero cada día de forma más irregular hasta su definitiva paralización en 1966. El 26 de junio de 1969 se autorizó su sustitución mediante autobuses diesel.
Durante largos años, los trolebuses Pegaso quedaron abandonados en las cocheras de Castellón

Aunque en principio, el proyecto contemplaba un parque móvil mínimo de diez trolebuses, finalmente solamente se adquirieron cuatro unidades, suministradas por la firma Pegaso en 1956. Tras el final del servicio, quedaron apartados durante muchos años en la fabulosa cochera construida para este servicio, situada a la salida de Castellón sobre la carretera de Almassora. Afortunadamente, este edificio se conserva en la actualidad como sede del parque móvil de la Diputación de Castellón.
Los trolebuses de La Plana también contaron con un camión Chevrolet para servicios auxiliares

En definitiva, tras una génesis particularmente dilatada, el proyecto de trolebuses de La Plana impulsado por las instituciones de Castellón se saldó con un estrepitoso fracaso. Veinte años de proyectos y obras para una explotación que únicamente prestó servicio, y de forma muy irregular, durante poco más de cinco años. Esperemos que su heredero, el TRAM, tenga más suerte en el futuro. Sin embargo, el fabricante de los trolebuses dotados de guiado óptico, Irisbus, ha abandonado su producción ante la escasa demanda de su producto, lo que obligará a adquirir las nuevas unidades necesarias para prestar en servicio en la ampliación al Grao a otros fabricantes, para adaptarlos al sistema, ya que, en la actualidad, el TRAM únicamente dispone de tres coches.

2 comentarios:

  1. con el dinero que esta costando el TRAM y creo que algùn dia se terminara, porque desde el 2005 hasta la fecha 2014 solo va hasta la UJI, que no fracase como el TROLEBUS.

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  2. Pues la cosa no pinta nada bien de momento y me temo que se repita el fracaso nuevamente.

    Supongo que sabrás que el trolebús guiado por carril central de Caen se va a sustituir por un tranvía convencional. La empresa fabricante de los vehículos ha fracasado estrepitosamente.

    Que conste que me gustan los trolebuses y que en su momento los disfruté en Coimbra.

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